ANOTACIONES DE UNA VIDA SENCILLA

En esta página espero reflejar pequeños detalles, comentarios y experiencias que puedan, porque no, algún día ayudar a alguien.

18 septiembre 2012

Padres e hijos

Desconocía este video hasta que lo vi ayer en la clase de orientación familiar del máster. No nos damos cueta que nos imitan, los niños son esponjan que van adquiriendo aquellas actitudes que ven en sus mayores, sean padres, profesores, amigos o familiares. Cada día me doy cuenta que tengo una gran responsabilidad, una responsabilidad que va a crecer en breve... http://www.youtube.com/watch?v=sV9FKNIuwLQ

10 diciembre 2010

24 febrero 2010

El hombre tranquilo

Él era un hombre tranquilo. Recorría los pasillos de la escuela a paso lento, sin prisas, dando la impresión de que la vida no tenía más vueltas por mucho que quisieras revolucionarla.
Tenía por aquel entonces unos 50. Cara de bonachón y mediana estatura. No era bien parecido y tampoco se molestaba en aparentar, con sus gafas antiguas, el peinado descuidado y una vestimenta que recordaba la moda de otra época.
Siempre admiré su forma de ver la vida, sus pausas, su tranquilidad. Sus clases eran diferentes. Diálogos. Conversaciones sobre temas a veces incoherentes, a veces simplemente magistrales, aunque muchos no entendían la importancia de sus palabras.
No se fijaba en el que hablaba sino en sus palabras, no quería oír alabanzas ni cantos de sirena, sólo quería hacer reaccionar a los díscolos, a los que no solían hablar.
Él era un hombre tranquilo que no miraba a los espejos como los demás. Él sólo quería vivir su vida y aportar su granito de arena. Recuerdo su gesto de alegría cuando conseguía discutir con algún alumno que sabía que no solía ir a clase o suspendía muchas asignaturas, esos eran sus preferidos, quería abrirles los ojos, aunque normalmente los ojos querían permanecer sellados.
No se porqué me acordé hoy de él.
Pero le guardo mucho cariño.

15 enero 2010

Un nuevo año, una nueva ilusión

Llegó 2010.
Y con el nuevo año llegan los propósitos de cada uno, que si hacer más ejercicio, adelgazar, dejar de fumar, etc... buenas intenciones que la mayoría de las veces quedan en eso, intenciones.
A mi no me gusta hacer nuevos propósitos con la llegada del año nuevo. Normalmente siento más cambio con la llegada de septiembre que con la de enero. Será la costumbre del retorno al colegio, no se. Pero cada vez que escucho a alguien las novedades que intentará en su vida en enero me entra la risa. Y que no se sienta nadie ofendido, que me parece muy legítimo, pero no conozco tres casos de intenciones mantenidas en el tiempo más allá de un par de meses.
Ha llegado 2010.
Si miro al pasado, me vuelve a entrar la risa. Los que seáis de mi generación, o generaciones anteriores os pasará lo mismo. Os acordáis..... En los 80 se veía este año como si fuéramos a vivir en el espacio, a viajar en coches voladores, a tener una tecnología increíble que nos permitiría estar en Marte, la Luna o viajar interestelarmente.
¿Y dónde estamos?
Pues más o menos en el mismo sitio.
Hemos ganado en tecnología si, pero de comunicación, que si teléfonos móviles, internet (eso si que ha sido un cambio sin duda), televisiones, juegos.... pero más allá del entretenimiento no ha habido grandes cambios. CONSUMO, CONSUMO y MÁS CONSUMO. Nos quieren hacer ver la vida como si nos hicieran un favor cuando lo único que hacen es VENDER.
Hemos pasado del miedo a los ataques nucleares comunistas, al miedo al ataque terrorista.
Hemos pasado de querer ser un país que quería vivir en democracia a ¿un país?.
Hemos pasado de tener una cultura rompedora, innovadora, plural, sin complejos a tener un mismo guión del que pocos pueden salir, y si lo intentan deberá ser por sus propios medios, nunca ayudados por empresas consolidadas, que sólo quieren "mierda", con perdón.
Llegó 2010 pero el número no importa, sólo importa que ha pasado un nuevo año y seguimos aquí. Cada uno que viva la vida como mejor pueda, porque mañana..... quién sabe que nos deparará el mañana.

04 diciembre 2009

Cada día más enganchado

03 diciembre 2009

Hoy cumple dos años

Hace algunos años ni se me pasaba por la mente la idea de ser padre. Me parecía una locura, una responsabilidad que no sabría afrontar.
Con el tiempo vas madurando la idea. Con los sobrinos, los hijos de los amigos, vas empatizando con el la idea de que quieres vivir esa experiencia, quieres afrontar el reto, quieres intentar no engendrar un monstruo, sino un ser humano que pueda vivir en esta sociedad que da un poco de miedo.
Así empezó todo, hace apenas dos años.
Nació a las 16.30, con un peso de 3 kilos y 380 gramos. Aún parece que fue ayer. Recuerdo como su madre me despertó de madrugada y lo tranquila que vivimos la experiencia, aún me sorprende la calma que nos dimos, que si ducharse, coger las cosas sin olvidar nada, hasta el viaje al hospital, con breves paradas por las contracciones, fue plácido.
Nació entrada la tarde, no tenía prisa por salir. Y han pasado dos años ya.
Hemos vivido momentos duros, dulces, apasionantes, tristes, alegres, pero sobretodo felices la mayor parte. Nos ha dado más de lo que le estamos dando, porque incluso creo que aprendemos con él más de lo que podemos enseñarle.
Le hemos visto nacer, llorar, reír, gatear, besar, andar, hablar, correr, soñar, enfermar y curar.
Hemos vivido noches de insomnio, viajes al hospital, sustos infundados, alegrías inesperadas, tantas novedades en estos dos años...... que sólo puedo decir:

Estoy contento de ser padre
Estoy contento de tener un hijo

GRACIAS XOEL

21 octubre 2009

Un día normal

Hay días en los que cuesta levantarse. Parece que las fuerzas nos abandonan y el alma, ¿existirá el alma?, nos ha dejado en la estacada.
Hay días en que te planteas todo. Días de otoño, como hoy, en que las nubes se hacen contigo.
Ayer eras feliz y hoy no sabes si algo tiene sentido. Es en esos días en los que tienes que ser más fuerte de lo que realmente te crees, porque SI que lo eres, y sales adelante. La vida no siempre es fácil, la vida está llena de baches, de pruebas, de bromas pesadas que hay que dejar atrás.
Hay días malos, pero los buenos siempre acabarán ganando, como en las pelis de vaqueros que tanto le gustan a mi padre.
Hoy no es un día especialmente bueno, pero no me siento triste, estoy contento, porque al menos sigo viviendo y como decían mis admirados FAEMINO Y CANSADO:
"Primero hay que sufrir para saber después: que bien te lo estás pasando."